Me llamó la atención ahí sentado en el escalón de su casa, era Domingo de Resurrección y la procesión del Resucitado de Rota (Cádiz) pasaba por delante de él pero no se inmutó ni con la banda de música, ni con los nazarenos, ni con los cargadores que llevaban el paso. Al finalizar el cortejo simplemente se levantó, se dio la vuelta y se metió en su casa, solo.
Hablaban poco, se abrazaban mucho, no pidieron ayuda a nadie para hacerse su foto de enamorados junto a la Giralda de Sevilla
Aunque a los sevillanos nos cueste creerlo, también hay procesiones de Semana Santa en otros lugares ;)
En Sevilla no hace falta mucho para que organicemos una procesión... Si además no coincide con la Semana Santa, pueden producirse estampas tan curiosas como ésta
Su mirada triste y solitaria me llamó la atención entre todo el ajetreo de la plaza de abastos de Sanlúcar de Barrameda. Estuve sentado más de media hora frente a ella, esperando a que mis acompañantes terminaran sus compras, nadie le compró nada, nadie se paró a ver su mercancía, de hecho nadie la miró...
Dos cosas me llamaron la atención mientras observaba esta escena, la primera era el contraste entre lo envejecido de la fachada y la casi "insultante" juventud de los críos, y lo segundo que me llamó la atención es que por la derecha no venía nadie, de hecho los padres venían justamente por la izquierda pero ellos tenían sus cámaras preparadas como si algo fuera a pasar...
Me encanta la fotografía callejera, pero suelo practicarla muy poco, seguramente por mi carácter algo tímido y porque con mi cerca de metro noventa y más de cien kilos, difícilmente paso desapercibido... el caso es que me llamó la atención este puesto de un mercadillo que únicamente vendía higos (aquí los llamamos higos chumbos) y caracoles... además el vendedor ofrecía a todo el mundo probar la mercancía antes de comprarla, extrañamente todo el mundo probaba los higos, nadie los caracoles... jejejej
